La justicia investiga la muerte de una agente de la policía de Mendoza en un hecho que por ahora está caratulado como suicidio.
La víctima identificada como E. Funes prestaba servicios en la localidad de Godoy Cruz y tenía domicilio en San Martín, unos 40 km al este de la capital mendocina, lugar donde sus familiares la hallaron sin vida.
Testigos indicaron que era sostén de familia y tenía una pequeña hija. También señalaron que la mujer no solo cumplía con su turno laboral sino que además, para ganarse un extra, hacía turnos especiales en el departamento donde vivía.
Otra fuente señaló que se encontraba en estado de angustia, porque había solicitado el traslado desde el Gran Mendoza hacia la zona este porque perdía mucho tiempo en traslados y quería estar más cerca de su hija.
Será ahora tarea de la justicia forense investigar si la mujer padecía algún inconveniente en su salud mental que la haya llevado a tomar la decisión de quitarse la vida.
La noticia causó estupor en las fuerzas policiales. Sus compañeros de tareas se expresaron con elogios hacia la mujer en las redes sociales.
También trascendió el malestar que se vive en esos ámbitos, dado a que es el sexto caso de suicidio de un policía en la provincia.
Desde la Asociación de Esposas y Familiares de uniformados organizaron una convocatoria para esta jornada para ser escuchados por que ellos contabilizan 15 policías que se quitaron la vida en el último periodo.
