La diputada nacional y ex intendenta de la localidad de Charata, María Luisa Chomiak, habló este miércoles por la mañana con Radio Provincia para hacer un repaso de los trabajos impulsados entre los gobiernos nacional y local que surten impacto en la zona del sudeste, valorando la impronta del mandatario chaqueño para garantizar los avances a pesar de los obstáculos planteados desde el arco opositor.
En principio, la legisladora planteó que se vivió “con mucha preocupación” la no aprobación del Presupuesto Nacional 2022 atento a la cartera de obras de infraestructura que contemplaba para el Chaco, sin embargo, destacó que “llegamos a las oficinas de Vialidad Nacional y comprobamos que el gobernador se encargó que cada una de las obras que estaban en el Presupuesto estén garantizadas”.
En ese sentido, valoró la continuidad de los trabajos sobre la Ruta Nacional Nº 89, que cuentan ya con un 98% de avance y tienen fecha de inauguración para este año, y precisó que “se está llevando a cabo un bacheo intensivo desde Charata a General Pinedo”. Además, agregó que “está en período de licitación una obra importante, que tiene que ver con un financiamiento de contrato por 4.000 millones desde General Pinedo a Quimili, y es trascendente porque la ruta viene aparejada con la adecuación hídrica”.
A su vez, la diputada se refirió al gran caudal de precipitaciones que se vivió en el último tiempo en la provincia y que afectó principalmente la zona sudeste, ante lo cual, señaló que “el cambio climático ha venido para quedarse, entonces, el gobernador con muy buen tino, dio la orden de que se trabajara en encauzar el agua”.
En esa línea, también llamó valoró el trabajo impulsado por Capitanich junto a los gobernadores de Santiago Del Estero y Santa Fe con autoridades nacionales por los bajos submeridionales, y adelantó que “en la semana entrante va a haber una reunión nuevamente para trabajar en eso, pero mientras tanto, el gobernador –Capitanich- dio la orden de trabajar la cuestión coyuntural y que en el año venidero los impactos sean menores, porque deteriora los caminos necesarios para la salida de la producción”. “La importancia de los bajos submeridionales es que nos va a permitir encauzar y retener el agua cuando la necesitemos. Es una obra importantísima, que también nos va a dejar recuperar hectáreas de tierras para que se conviertan en cultivables”, explicó
