El estreno de “50 segundos: El caso Fernando Báez Sosa” en Netflix, la docuserie que recrea el crimen del joven a manos del grupo de rugbiers en 2020, generó todo tipo de reacciones, y ahora muchas preguntas giran en torno a los tres condenados que no recibieron prisión perpetua y a cuándo podrían salir en libertad.
Blas Cinalli, Ayrton Viollaz y Lucas Pertossi son los rugbiers condenados a 15 años de prisión por el asesinato ocurrido en la madrugada del 18 de enero de 2020, cuando salían de un boliche en Villa Gesell.
El tribunal, compuesto por María Claudia Castro, Emiliano Lázzari y Christian Rabaia, determinó que estos tres rugbiers actuaron como partícipes secundarios en un “homicidio doblemente agravado por el concurso premeditado de dos o más personas y por alevosía, en concurso ideal con lesiones leves”.
Para ellos, el Código Penal argentino establece que, tras cumplir siete años de condena efectiva, los condenados pueden solicitar salidas transitorias. Este beneficio les permitiría permanecer fuera del penal por algunas horas, aunque deberán regresar el mismo día.
Recibieron prisión perpetua, las penas más altas, Máximo Thomsen, Ciro Pertossi, Enzo Comelli, Matías Benicelli y Luciano Pertossi. De ese grupo, todos menos Benicelli aportaron su testimonio para la docuserie de Netflix.
¿Cuándo podrían quedar en libertad los tres rugbiers condenados a 15 años de cárcel?
Blas Cinalli, Ayrton Viollaz y Lucas Pertossi, detenidos desde enero de 2020 y con la pena firme desde marzo de 2024, podrían solicitar salidas transitorias a partir de principios de 2027, siempre que la Justicia confirme la sentencia. Cabe recordar que el tiempo pasado en prisión preventiva se computa como parte de la condena.
Además, si se cumplen con los requisitos legales y mantienen buena conducta, la legislación argentina establece que podrían acceder a la libertad condicional una vez que hayan cumplido dos tercios de su condena, es decir, 10 de los 15 años. Así, podrían terminar de cumplir la condena fuera de la cárcel.
De esta manera, los tres rugbiers podrían estar en condiciones de acceder a la libertad condicional a partir de enero de 2030, antes de completar la totalidad de los 15 años de condena.
En caso de cumplir la pena completa sin acceder a beneficios, su salida definitiva de prisión se daría en enero de 2035.
