Valentina y Facundo Macarrón defienden la inocencia de su padre, juzgado como principal acusado de intigar el crimen de su madre en 2006. Anticiparon que presentarán nuevas pruebas que involucran a “un empresario que era amigo de la familia».
La hija de Nora Dalmasso, la mujer asesinada hace 15 años en Río Cuarto, Córdoba, y de Marcelo Macarrón, el médico acusado de instigar el femicidio, defendió a su padre, dijo que todo lo que dicen de él es «mentira» y aseguró que lo vivido a partir del hecho «los destruyó».
“Éramos muy unidos y esto nos destruyó”, manifestó Valentina Macarrón al iniciar a las 12 su declaración como testigo en el marco del juicio que se le lleva adelante a su papá por el crimen de su madre, cometido el 26 de noviembre de 2006 en la ciudad cordobesa de Río Cuarto.
Los hijos de Marcelo Macarrón (62) declaran como testigos en la tercera audiencia del juicio que tiene a su padre como acusado de instigar el crimen de su madre, Nora Dalmasso (51), y anticiparon que aportarán pruebas que involucran a un empresario como el presunto autor del asesinato ocurrido el 26 de noviembre de 2006 en Río Cuarto.
Valentina Macarrón (30), el pasado lunes, había anticipado que al momento de prestar testimonio, junto a su hermano Facundo, presentará nuevas pruebas que involucran a “un empresario que era amigo de la familia» como el presunto autor del asesinato de su madre.
La hija de la víctima había manifestado a Télam, el pasado lunes cuando comenzó el juicio, que durante el proceso de instrucción de la causa habían “aportado un montón de pruebas sobre el sospechoso del crimen y nunca se investigó”, y que hoy van a “presentar nuevos elementos” al respecto.
Dijo también que su padre es “inocente” y que a lo largo del proceso de investigación se dijeron “muchas mentiras en la causa” y que “quizás también se haya politizado” el crimen ocurrido el 26 de noviembre de 2006 en Río Cuarto.
Al referirse a la hipótesis de las desavenencias matrimoniales, como plantea la acusación como uno de los móviles del crimen, dijo: “Mi papá y mi mamá se amaban. Jamás podría matarla. Mi padre es totalmente inocente”, remarcó Valentina.
Por su parte, Facundo calificó de “mamarracho todo lo que hizo» el fiscal Luis Pizarro, quien elevó la causa a juicio contra su padre, al acusarlo de contratar a un sicario para concretar el crimen de su esposa mientras él disputaba un torneo de golf en la ciudad uruguaya de Punta del Este.
“Desde el punto de vista lógico y jurídico, jamás se puede llegar a una sentencia condenatoria” porque “la acusación no tiene ningún sustento probatorio. No tiene respaldo de hechos objetivos que justifique que mi padre esté hoy sentado en el banquillo de los acusados”, había manifestado Facundo.
En ese sentido, añadió que “nunca en la historia judicial de Argentina un autor intelectual fue condenado sin conocerse a los autores materiales”.
“No hubo crisis matrimonial ni intenciones de divorcio”, como se plantea en los hechos de la investigación, “siempre los vimos unidos. Fueron un ejemplo de amor”, había afirmado al encabezar, junto a su hermana Valentina, una manifestación en apoyo a la “inocencia” de su padre frente a los tribunales donde se realiza el juicio.
