Un joven de 29 años fue asesinado por su hermano, quien lo agredió a golpes y a balazos en una supuesta pelea que habrían entablado dentro de una vivienda. El suceso se registró el sábado en el oeste del territorio bonaerense y los pesquisas detuvieron al presunto atacante. La víctima y el apresado son familiares de una oficial de la Policía de la Buenos Aires.
Voceros judiciales revelaron a cronica que el fallecido fue identificado como Federico Martín Heidenreich.
Según agregaron los informantes, el hecho se descubrió cuando los integrantes del Comando Patrulla (C.P.) recibieron una denuncia, la cual hacía referencia a una persona fallecida en una finca situada en Del Pilar al 3400, casi en el cruce con San Vicente, en el barrio Lanusse.
Trascendió que, al ingresar a la vivienda, los efectivos policiales observaron el cadáver del muchacho, certificándose que en el domicilio también se hallaban Dina Salomé Heidenreich, de 33 años y oficial de la mencionada institución policial, y un individuo, de 25, ambos hermanos de la víctima.
Peritos de la Policía Científica, al ser convocados por las autoridades de la Justicia, revisaron al occiso y determinaron que presentaba golpes en la cabeza y una certera herida de arma de fuego en la región torácica.
Apresado
En base a los datos aportados al expediente, los servidores públicos de la comisaría 1ª del distrito aprehendieron al hermano de Federico, ya que está sindicado de haber sido autor del asesinato, estimándose que el mismo aconteció como saldo de una disputa.
Al respecto, la mujer sostuvo que había hallado el cuerpo de la víctima cuando arribó al inmueble.
Miembros de la seccional establecieron que Federico había radicado el 18 de noviembre una denuncia ante los uniformados por “Averiguación de paradero”, porque aseguraba que desconocía la suerte de su hermano.
Intervino en la causa penal, que preventivamente se mantiene caratulada “Fraticidio”, la Unidad Funcional N° 10 perteneciente a los tribunales de la jurisdicción, cuyas autoridades resolvieron que se incautara la pistola Bersa TPR de calibre nueve milímetros de la oficial, ya que se intenta comprobar si se utilizó para matar a la víctima.
