El procedimiento estuvo a cargo de los agentes de la Primera Metropolitana. Un sujeto forzaba el candado de una Skua 200, pero al ver a los efectivos huyo del lugar.
La moto fue abandonada por esta persona en Santa María de Oro al 210 y la patente que tenía era de una Guerrero, robada en 2019.
Cerca de las 01, agentes de la Primera Capital, se encontraban en circulación por Santa María de Oro, a fin de completar una diligencia.
Al llegar a la altura del 210, observan a un sujeto que pateaba el candado de una moto de alta cilindrada, pero al ver el patrullero acercarse, desistió de su accionar y huyo.
Los efectivos descendieron del móvil y constataron el dominio de la Motomel Skua, el cual figura en el Padrón Unificado de Motovehiculos, con pedido de secuestro por una causa de “Supuesto Robo” desde el 2019, pero que pertenece a una Guerrero de 110 cc.
Por ello y para poder establecer la procedencia y propiedad del motovehículo, lo llevaron a la unidad a la espera que el propietario se acerque a reclamarlo. –
