El femicida sería alojado en la cárcel de Bouwer. El menor cumple seis años este martes y se analiza quién será el familiar que quede a cargo de su resguardo.
Pablo Laurta, sindicado como autor del doble femicidio de su expareja Luna Giardina y exsuegra Mariel Zamudio en el barrio Villa Serrana de Córdoba y del secuestro de su hijo de seis años, sería trasladado este mismo martes a esa provincia y alojado en la cárcel de Bouwer para quedar a disposición de la Justicia.
El femicida es también investigado su participación en la desaparición y posible asesinato de Martín Palacios, el chofer con el que tuvo contacto en Concordia el 7 de octubre pasado, fecha desde la cual no se conoce el paradero del remisero.
Pablo Laurta, sindicado como autor del doble femicidio de su expareja Luna Giardina y exsuegra Mariel Zamudio en el barrio Villa Serrana de Córdoba y del secuestro de su hijo de seis años, sería trasladado este mismo martes a esa provincia y alojado en la cárcel de Bouwer para quedar a disposición de la Justicia.
El femicida es también investigado su participación en la desaparición y posible asesinato de Martín Palacios, el chofer con el que tuvo contacto en Concordia el 7 de octubre pasado, fecha desde la cual no se conoce el paradero del remisero.
El lunes se halló un cuerpo desmembrado y sin cabeza en en la zona de Yerua, a unos 35 kilómetros al sudoeste del centro de Concordia. La fiscal a cargo, Daniela Montangie, aseguró que, aunque por el momento no se confirmó la identidad, “hay altas probabilidades que sea el cuerpo de Martín Palacios”.
Si bien aclaró que por el momento se desconoce el estado psicológico del menor, aseguró que profesionales están trabajando para alivianar el efecto traumático.
“Se activó un protocolo para que desde Entre Ríos se hagan las primeras contenciones. Mientras desde acá nuestro equipo tenía la misión central de indagar con que familia podía ir el niño”, explicó anoche Montero, en diálogo con El Doce.
La funcionaria descartó que el menor sea derivado a una residencia y remarcó que “lo mejor en este caso es que el niño esté en una familia de un entorno que le sea familiar”.
La ministra anticipó que aún resta encontrar una resolución de fondo para garantizarle un entorno seguro y afectivo al menor y decidir “cómo el niño va a seguir su vida y con quiénes. “Esto requiere mucha más evaluación e intervención de psicólogos y trabajadores sociales”, explicó.